“¡Espera a verme en mi próxima película, interpreto al peor bicho con el
que hayas podido tropezarte nunca!” - Exclamó desde
la acera del restaurante “21” un
jubiloso Humphrey Bogart a Archer Winsten crítico cinematográfico
del NY Post.
Corría el año 1946 y Bogie
estaba realmente excitado ante la perspectiva de volver a trabajar con su amigo
John Huston, interpretando a un
personaje muy alejado de los papeles heroicos que se le presumían por ser una
gran estrella en la cima de su carrera. Afortunadamente Bogart, por su status y por su gran tirón de taquilla, se había
liberado de las restricciones de la política del estudio y se hallaba en
condiciones de escoger los papeles que le apetecieran. Utilizó esa libertad
para interpretar a Fred C. Dobbs un auténtico looser al que la fiebre del oro y la avaricia empujan a la locura
en “El tesoro de Sierra Madre”.
FICHA
TÉCNICA: EL TESORO DE SIERRA MADRE “The treasure of the Sierra Madre”
AÑO: 1948. DURACIÓN: 126 min. PAÍS: Estados Unidos.
DIRECTOR:John Huston.
GUIÓN: John Huston. MÚSICA: Max Steiner. FOTOGRAFÍA: Ted McCord.
REPARTO: Humphrey Bogart, Walter Houston, Tim Holt, Bruce Bennet, Barton McLane, Alfonso Bedoya.
AÑO: 1948. DURACIÓN: 126 min. PAÍS: Estados Unidos.
DIRECTOR:John Huston.
GUIÓN: John Huston. MÚSICA: Max Steiner. FOTOGRAFÍA: Ted McCord.
REPARTO: Humphrey Bogart, Walter Houston, Tim Holt, Bruce Bennet, Barton McLane, Alfonso Bedoya.
PRODUCTORA: Warner Bros. Productor: Henry Blanke. GÉNERO: Aventuras.Thriller.
SINOPSIS: Fred Dobbs y Curtin son dos vagabundos que
tratan de subsistir con "lo que sale" en la ciudad mexicana de Tampico. Ambos se
unen a Howard, un veterano buscador de oro, y parten hacia el interior del país
en busca del preciado metal. Desafiando desiertos, junglas y bandidos consiguen
llegar a una recóndita montaña rica en oro. Pronto la codicia y la envidia
harán mella en el grupo transformando a los protagonistas en seres rencorosos y
desconfiados.
“El tesoro de Sierra Madre” es para muchos aficionados
y críticos cinematográficos la mejor película de John Huston y la caracterización de Fred C. Dobbs la mejor
interpretación de Humphrey Bogart en
toda su carrera.
No es de extrañar puesto que el tandem Huston-Bogart vuelve a arriesgar y a
triunfar, como ya lo hicieron en “El
halcón maltés”, yendo más allá de lo que cabría esperar de un film de
estudio con estrella.
Huston rompe todas las reglas:
Compone un guión, escrito en intensa colaboración con el
autor de la novela en la que se basa el film Bruno Traven (personaje pintoresco al que dedicaré en los
comentarios algunas líneas), en el que la acción se desarrolla en un
polvoriento paisaje de tierras secas muy alejado de la fantasía exótica y
colorista en la que habitualmente se ambientaban las películas de aventuras de
la época.
Propone unos protagonistas atípicos. Tres perdedores en
busca del oro como pasaporte para una vida mejor. Howard, el viejo buscador, por
su experiencia sabe que nada dura y que la fiebre del oro es capaz de quebrar
los lazos más fuertes. Curtin, el más joven, con el carácter sin formar se
debate entre la honradez y la codicia. Y Dobbs, el más débil de los tres,
resulta ser a la larga víctima de su miedo y su cinismo.
Y por último, dos detalles que torpedeaban de lleno la
línea de flotación de la política de las majors:
La película carece de una historia de amor (de hecho no hay protagonistas
femeninas) y de un final feliz.
Gracias al excepcional guión, el rodaje de exteriores "realista" en México, la brillante planificación y a las
magníficas interpretaciones de Walter
Huston (cálida y entrañable), Humphrey
Bogart (estremecedora y febril) y Tim
Holt (sobria y creíble).
La arriesgada apuesta de Huston tiene como resultado esta excepcional película.
La arriesgada apuesta de Huston tiene como resultado esta excepcional película.
Por último, y como muestra del impacto que produce la
película cuando se ve por primera vez, citaré las palabras que escribió Jack Warner en un telegrama a la sede
Warner de New York tras ver el primer
montaje del film: “Se trata sin duda de
la mejor película que hemos hecho nunca”.
Pues aunque recuerdo la película perfectamente, ya me he puesto a descargarla y en cuanto la repase os cuento. Lo que yo más recuerdo así, a bote pronto, es el gran personaje que hace el padre de Huston y la transición que experimenta Bogart de ser un tipo más o menos legal, con su propia ética, eso sí, a ser un auténtico cabrón.
ResponderEliminarSemejante análisis no lo recuerdo más que en la opresiva "El sirviente" de Joseph Losey con el nunca bien ponderado Dirk Bogarde consiguiendo que el bueno de James Fox se transforme en una piltrafa humana. Aunque esta película es mucho más que eso, claro.
Un saludo y nos vemos pronto.
@Victor: No te arrentiras de revisarla.
ResponderEliminarAparte de lo más obvio grandes interpretaciones y una historia sólida y muy bien desarrollada, merece la pena resaltar la planifición de las secuencias que hace Huston.
Citaré algunos de aténtico lujo:
-Dialogos entre Curtin y Dobbs rodados con uno de los interlocutores en primerísimo plano y con el otro detrás.
-Las escenas en la torre de madera mientras trabajan para el contratista estafador alternando picados y contrapicados.
-La pelea en el el bar, absolutamente verista ,cosa que en estos tiempos de films en los que cualquier pelanas lucha como si fuera un cruce entre Jackie Chan y Muhammad Ali, se agradece sobremanera.
-Cuando a Curtin le vence el sueño (lo explicaré ampliamente en mi momento favorito de la peli.
- Y la apariciòn del reflejo de sombrero dorado en el agua del abrevadero y la cara de Dobbs al verlo.
A ver si pillais alguno más con este nivel de genialidad.
La interpretación de Bogart es impresionante. Está absolutamente poseido. Juraría que no estaba actuando, esa mirada febril,esa obsesión,esa fiebre del oro.Me asombra aún más por ser un papel tan diferente de los que ya hemos visto desde el comienzo de esta andadura.Se trata de un registro muy distinto pero que da la talla de gran actor que es.
ResponderEliminarEl personaje de Howard el viejo buscador, es entrañable, muy redondo.
Todo el reparto acompaña perfectamente.
La integración de los tres americanos en el entorno mejicano me parece casi de documental. Las escenas están rodadas al aire libre con luz natural,con muchos extras que son el pueblo llano mejicano.Huston debió quedar cautivado por esa gente y por el paisaje.No escatima en primeros planos de las caras de los nativos, sobre todo en la escena de la resucitación del niño ahogado. De hecho fue en el rodaje de esta película cuando el director descubrió el paraje en el que acabó viviendo muchos años después y donde pasó sus últimos días. Claro que Huston comentaba que nunca se había marchado de Hollywood, porque hacía frecuentes viajes, incluso en el día a la meca del cine, desde su retiro en Méjico.
El blanco y negro que tanto cautiva en las pelis de interiores del cine negro, en este caso, me parece que no aporta al resultado estético del film. Al ser una película rodada en exteriores, no mejora por ser en B/N.
Y por fin el mensaje moralizador: "la avaricia rompe el saco". Una vez más Huston pone en boca de uno de los protagonistas la reflexión final. Tim Holt dice: a veces cuando lo peor ocurre, te das cuenta de que no es tan malo. Dice algo así.y anñade que el pque peor parte se ha llevado ha sido su amigo Fred Dobbs.
Os hablaré un poco de Bruno Traven, el autor de la novela en la que se basa la película, y de su relación con el rodaje y con Huston.
ResponderEliminarBruno Traven mantenía una aureola de misterio en torno a su persona, su pasado y su paradero.
Nadie sabía su verdadero nombre ni su nacionalidad ni siquiera donde vivía. Él se ocultaba bajo varios nombres falsos con los que publicaba sus libros y artículos periodísticos. Todo parece indicar que era un actor de teatro y autor alemán huido de los nazis y refugiado en México aunque él se declaraba norteamericano (californiano) y afirmaba que vivía ¡Como pastor de ovejas en Oklahoma!
El caso es que Huston tras colaborar con él por correo en la elaboración del guión y estando ambos satisfechos con los resultados decide entrevistarse personalmente con Traven y se cita en México, en la zona donde se iba a desarrollar el rodaje.
Tras una semana de espera y sin señales del autor Huston se despertó una mañana en la habitación de su hotel y se encontró a los pies de su cama a un sujeto que dijo llamarse Hal Croves; Bajito, tímido y pelirrojo era el supesto traductor de Traven y tenía plenos poderes para representarle.
Todo parece indicar que Croves(al que apodaban en Warner "El fantasma de México") y Traven eran la misma persona y aquella farsa proporcionaba a Traven un disfraz más para satisfacer su paranoia y un divertido juego para Huston.
El caso es que Croves/Traven fue contartado por Warner como asesor para el rodaje con un salario de 500$ semanales y estuvo ayudando a Huston con las localizaciones y durante el rodaje.
La asociación fue muy provechosa ya que Traven en sus cartas (que Croves presentaba a Huston) sugirió detalles como:
El asalto al tren por los bandidos de "Sombrero dorado" con el cruce de disparos entre Bogart y él.
Y que el propio Huston interpretase al americano rico que da limosna reiteradamente a Dobbs en Tampico.
Tras terminar el rodaje en México el equipo decidió seguir contando con Croves/Traven como asesor en Los Angeles donde se iban a terminar de rodar las escenas que faltaban durante todo un mes.
A los dos días del comienzo de esta segunda etapa del rodaje Croves no volvió a aparecer.
Y al poco tiempo Traven publicaba una carta en la revista "Life" afirmando esto:
"Nunca jamás volverá el sr. Huston a tener la oportunidad de dirigir una película basada el cualquier otro de los 14 libros de Traven. Traven no necesita al sr. Huston".
¿A qué venía todo esto? Si parecía que todo había sido miel sobre hojuelas durante el rodaje mexicano.
Fue determinate la rebaja del sueldo de asesor del sr. Croves a 100$ semanales y es que tal como escribió en la carta "pagarme 100 miseros dólares semanales" indicaban lo poco que apreciaban al sr. Traven en Warner.
"El tesoro..." es una película llena de grandes momentos candidatos a mi momento favorito de la peli, podría citar cualquiera de los siguientes:
ResponderEliminar- La alegría de Howard bailando y burlandose de los dos "novatos" en el momento de encontrar oro en la base de la montaña.
- El reflejo de "sombrero dorado" en el agua del abrevadero cual némesis de Dobbs.
-Las dudas morales de Curtin durante el derrumbe de la mina.
-Los monologos alucinados de Dobbs en su descenso a la locura.
- El final de la peli con Howard y Curtin riendo mientras el viento dispersa todas sus riquezas.
Cualquiera de ellos valdría. Pero para mi hay uno superior. Es el principio de la secuencia nocturna entre Holt y Bogart, la hoguera de campamento crea un pequeño cerco iluminado y el resto es oscuridad. Curtin agotado por el sueño y el cansancio vigila a un Fred Dobbs maniaco que espera el momento en que el agotamiento venza a su rival para apoderarse de las armas y de todo el polvo de oro.
Huston coloca la camara a la espalda de Curtin y cuando este cae hacia delante vencido por el sueño aparece la cara de febril satisfacción de Dobbs iluminada por el fuego en la profundidad del plano.
Magnífico por la planificación, por la fotografía y por la interpretación de Bogart que con un gesto lo dice absolutamente todo.
En cuanto a mi momento favorito,coincido con David en que abundan las opciones en esta película. Yo elijo dos momentos.
ResponderEliminarEl primero por ser un punto de inflexión en la historia, más que por las características propias de la toma. Se trata de la escena en que Bogart se pone a hablar sólo. Está junto a su burro murmurando para sí que los otros le quieren engañar. El viejo Howard muy socarronamente le avisa de que eso de hablar sólo es muy mala señal. Me parece interesante porque confirma que a Fred la fiebre del oro empieza a afectarle de forma irremediable e imparable.
Hasta ese momento del film no sabemos con claridad quien caerá preso de la avaricia y quién no. Varias escenas nos van insinuando los efectos de la codicia en unos y otros, por ejemplo en la del derrumbamiento de la mina, cuando Curtin duda entre si rescatar o no a su compañero. Esos primeros momentos de Bogart acaban en la locura absoluta del final de la película cuando no sabe si enterrar a su amigo o no hacerlo.
En cuanto a la segunda escena, la elijo por la toma que realiza el director. Se trata de aquella en la que los tres deciden que el intruso, que quiere que compartan el oro con él, debe morir. La cámara enfoca desde abajo, asistimos al dialogo entre ellos, y aquí está lo interesante, como si fuesemos uno más del grupo. Da la impresión de que en cualquier momento se van a dirigir al espectador(que es la cámara) para pedirle su opnión. La interrelación entre los espectadores y la escena es tal que me sentía sobrecogida. Ellos están decididos a matar por su oro. ¿Y tú?.
Este efecto también se aprecia en las escenas nocturnas entorno al fuego. La cámara se coloca como si una cuarta persona(espectador) estuviese asistiendo al encuentro. Además por la noche el B/N queda muy sobrecogedor, a diferencia de lo que ocurre en las tomas diurnas.
Peliculón. Personajes ricos y bien construidos, historia buenísima y bien contada. Lo tiene todo. Lo que más me gustó es esa lucha interna, esa paranoia cuando tienen el oro y Bogart cree que lo van a robar (hicieran lo que hicieran o dijeran lo que dijeran sus compañeros, más se convencia de ello).
ResponderEliminarEl final también me gusta. Total, para mí, 9 sobre 10. Una peli para disfrutar.
P.D.: ¿Cómo es posible que el director de esta peli sea el mismo que el de Dubliners o el Halcón Maltés (tan dispares entre sí)?
En efecto Marc,resulta sorprendente la capacidad de diversidad que posee John Huston dirigiendo sus películas.Tanto los géneros que aborda: cine negro, aventuras, dramas western...como por las técnicas de filmación. No existe un estilo Huston. Sin embargo sí que podemos señalar elementos comunes a todas sus películas. El primero es que elige historias de perdedores, desamparados, marginales. la segunda que profundiza en la complejidad del ser humano,nos presenta situaciones emocionales y vitales de gran trascendencia y carga vital. La tercera es que al final de cada película nos ofrece una escena magnífica en la que desarrolla la lección moral con la que concluye le film.Esta son las que más me llaman la atención. ¿Se os ocurren a vosotros más puntos coincidentes en los films de Huston?
ResponderEliminarMuy interesante lo que planteais. ¿Otras constantes en el cine de Huston?
ResponderEliminar-Siempre trabaja sobre textos literarios, ya sean adaptados por el mismo o por otros.
-Siempre, aun en las palículas más dramáticas, introduce personajes con cierta vis cómica (el gordo en el halcón, Koby en la jungla, Walter en el tesoro, la señora con gafas y el abuelo en la noche y Anaclet en reflejos).
-Un trabajo de planificación de las secuencias que enfatiza la interpretación de los actores, sin caer en rápidas sucesiones de planos ni en planos largos excesivamente estáticos.
¿Se os ocurre algo más?