En
el que sería su último film un anciano y enfermo John Huston se enfrentaba de nuevo al reto de trasladar una obra
literaria al cine, teniendo en cuenta que la obra literaria es el relato “Los
muertos” del libro de James Joyce “Dublineses”, el director no se encontraba ante una situación nada fácil.
A
pesar de las dificultades Huston consigue
realizar la transposición del lenguaje literario de la obra de Joyce (sutil y preciso, hasta en los más
ínfimos detalles, pero con una narración en la que apenas pasa nada hasta el final
del texto) al lenguaje cinematográfico con naturalidad y eficacia. Configurando
así un hermoso y crepuscular fresco de la burguesía irlandesa de principios del
siglo XX. Un mundo anclado en el pasado, un mundo inmovilista y lastrado por
recuerdos nostálgicos; en definitiva un mundo que venera a los muertos por
encima de los vivos.
FICHA TÉCNICA: DUBLINESES
(LOS MUERTOS) “The dead”.
AÑO: 1987. DURACIÓN: 81 min.
PAÍS: Estados Unidos.
DIRECTOR: John Huston.
GUIÓN: Tony Huston. MÚSICA: Alex North. FOTOGRAFÍA: Fred Murphy.
REPARTO: Anjelica Huston, Donald McCann, Helena Carroll, Cathleen Delany, Ingrid Craigie, Dan O'Herlihy, Donald Donnelly, Maria McDermotroe.
DIRECTOR: John Huston.
GUIÓN: Tony Huston. MÚSICA: Alex North. FOTOGRAFÍA: Fred Murphy.
REPARTO: Anjelica Huston, Donald McCann, Helena Carroll, Cathleen Delany, Ingrid Craigie, Dan O'Herlihy, Donald Donnelly, Maria McDermotroe.
PRODUCTORA: Vestron Pictures, Delta Films, Zenith Entertainment,
Channel 4. GÉNERO: Drama. Costumbrismo. Fin de siglo.
SINOPSIS:
En un Dublín nevado durante las Navidades de 1904 se dan cita, para celebrar la
noche de la Epifanía en casa de las señoritas Morkan, un grupo de familiares y amigos
pertenecientes a la burguesía acomodada. Entre ellos Gabriel Conroy (sobrino de
las anfitrionas) y su esposa Gretta forman un sólido matrimonio en el que se
apoyarán las ancianas para que la velada se desarrolle de manera satisfactoria.
Ésta
va discurriendo de manera agradable entre conversaciones, bailes, poemas y
música. Tras la cena Gabriel cerrará la velada con un bonito discurso de
agradecimiento para las anfitrionas.
Para
realizar “Dublineses” el director se
apoyó en un guión muy fiel al texto original llegando incluso a reproducir
diálogos de forma íntegra.
La
exhaustividad descriptiva de Joyce
ayudó al director y a los actores a componer un cuadro absolutamente verosímil,
fiel reflejo de la sociedad dublinesa bienpensante de la época. La vida irlandesa, su hospitalidad, sus costumbres y sus
conflictos unidos al sentido de la muerte que se paladea durante todo el
metraje realzan la identidad de los personajes.
La proximidad a la muerte
física, real para las ancianas tías de Gabriel cubre otros matices: Los muertos
se implican en la rutina de la vida cotidiana condicionando las costumbres,
provocando una renuencia al cambio y al progreso. Estos muertos “sobreviven” en
la memoria de quienes mueren a diario sin algo por lo que vivir.
Con
una planificación y un montaje capaces de captar con sutileza la interpretación
de los actores (con sus miradas y sus gestos), los objetos (depositarios de
importantes informaciones) y en alas de la música (también la poesía) que actúa como
hilo conductor y catalizador de emociones; va avanzando la narración de manera
natural y fluida, casi toda ella ocupada por los acontecimientos que se van
desarrollando en la velada de las señoritas Morkan.
Mención
aparte merece la fotografía de Fred Murphy, con su
acertado uso de una tenue iluminación es capaz de evocar diferentes estados de
ánimo con discreción y sutileza. Puesta
en escena y fotografía componen unas imágenes que me recuerdan poderosamente los
colores y las atmósferas de la pintura de James Whistler.
Con
todos estos recursos y sin apoyarse en textos explícitos el director consigue
transmitir las reflexiones de Gabriel (Donald
McCann) y las emociones de Gretta (Angélica
Huston). A ambos el peso del pasado y de los muertos les conduce de
manera progresiva al desenlace final de la película. Este tramo final, que por
supuesto no desvelaré ahora, viene anunciado por la canción “La joven de
Aughrim” otro momento musical utilizado por el autor como catalizador de
emociones. A partir de ahí los protagonistas nos deleitarán con una sucesión de
momentos tan emotivos como melancólicamente hermosos, que finalizan con una
reflexión profundamente existencialista de Gabriel en forma de monologo
interior. John Huston acierta de nuevo trasladando este momento a la pantalla
con una sucesión de imágenes evocadoras acunadas por la voz en off de Donald McCann,
un recurso que no aparece en ningún momento previo del film y que es capaz de
plasmar la toma de conciencia que sufre
el personaje tras su particular epifanía.
Esta entrada se la dedico con mucho cariño a mi hermana Ana y a mi cuñado Paul (dublinés de pro) disfrutadla.
ResponderEliminarPara el resto de los seguidores de esta filmoteca desearos unas Felices Fiestas y muy buenos deseos para el año 2011.
Volveremos la primera semana de Enero para empezar nuestro miniciclo dedicado a Anthony Mann, id pensando que 5 películas quereis ver de este maestro del western.
Un abrazo para todos.
Yo propongo: 1/ Horizontes lejanos 2/ Colorado Jim 3/ El hombre del Oeste 4/ La caída del imperio romano y 5/ Bahía negra
ResponderEliminarBuen ciclo el de Mann, a ver qué sale de él! Un saludos para toda la gente del bloy y felices fiestas. Ciao.
Maravillosa película, novela de culto de uno
ResponderEliminarde los mejores novelistas de todos los tiempos
James Joyce; Angelica Huston cómo siempre impecable. Es un film denso, que dice más por lo que calla, que por las meras imagenes, diría
que ha veces claustrofófico: UN TESORO.
FELICES FIESTAS.
@ Susan Lenox: En efecto la adaptación que hizo Huston no es sólo escrupulosamente fiel a la obra de Joyce sino que consigue acertar con el ritmo narrativo, con los actores y con el uso de la voz en off en la secuencia final.
ResponderEliminarViendo que la literatura y el cine te apasionan, te invito a participar en un debate que se abrió en la entrada de "El halcón maltés" sobre que adaptaciones de la literatura al cine eran más fieles al original http://ciclos-decine.blogspot.com/2010/11/el-halcon-maltes.html aquí te dejo el hilo por si te animas a retomarlo.
Indudablemente "Dublineses (los muertos)" sería una de ellas.
Un saludo.
Excelente metraje,lleno de detalles,y de preciosismo. Es un canto melancólico de Huston a los recuerdos. Queda bien expresado en la escena en la que Gabriel lanza su discurso de homenaje y agradecimiento a sus tres anfitrionas.
ResponderEliminarEl final conlleva, como no, esa reflexión Hustoniana. Durante el film no ocurre nada, es descriptivo,refleja fielmente las costumbres de al buena sociedad de la época,el final da intensidad y coherencia a todo el guión, pero creo que aunque no hubiese existido ese final,la pélicula valdría por si misma,tal es el grado de perfeción de la descripción. Tanto por lo que se cuenta como por lo que no se dice,en esto estoy de acuerdo con Susan Lenox. A destacar la interpretación de Angelica Huston.
Verla ha sido un placer.
Feliz Navidad a todos!
Bien vamos con Dublineses:
ResponderEliminarUna joya, delicada y sutil,no apta para todos los paladares. O te seduce o te aburre (nunca mortalmente porque dura muy poquito). Yo me incluyo entre los seducidos, no me extraña que la asociación de críticos española la eligiese como mejor película de la década de los 80´s.
Me encanta como durante gran parte de la película Huston nos va desvelando la realidad de la época una Irlanda retrógrada que hastía a Gabriel y que se posiciona a favor del progreso;(Spoiler) es anglófilo, viaja por Europa continental, lleva chanclos para la humedad... Todo ello despierta la estupefacción de los otros invitados cuando no el reproche.
Aún así ese peso más profundo de la tradición,el respeto a los difuntos (con esto me refiero a las tías autenticos muertos en vida) sigue haciendo mella en él así le vemos permanentemente preocupado por su discurso durante la fiesta y la cena Es la prueba a la que se ve sometido por los jueces de la tradición y por los muertos.
Tres momentos musicales que despiertan las emociones profundamente enterradas dentro de Gretta:
-Durante el baile llega el primer aviso, Gabriel baila con la señora republicana que le reprocha su antichouvinismo y le emplaza a pasar las vacaciones en Galway, cuando Gabriel lo habla con Gretta ella manifiesta emoción... quiere ir, es el lugar donde pasó su infancia y adolescencia.
-El poema, para Gretta actúa de igual modo que la música. Es un poema de amor profundamente desgarrador y oscuramente hermoso. Esta segunda llamada hace caer el velo que tapa los ojos del alma de Gretta.
Tremendo momento interpretativo de Anjelica Huston sus gestos de profunda emoción que van en aumento conforme avanza el poema. Y Gabriel la mira una y otra vez, empieza intuir que algo no va bien.
-Llega el momento de abandonar la fiesta Gretta baja la escalera y suena "La joven de Aughrim", y aquí llega otra exibición de Anjelica.
El tiempo se detiene, el espectador sabe que algo importante está pasando pero no sabe el qué, el gesto de profunda melancolía, de encuentro con una presencia fantasmal esperada desde hace largo tiempo¡Es absolutamente sobrecogedor! Y allí está Gabriel en sombras al pie de la escalera, creo que asustado por lo que está viendo, un profundo cambio en Gretta que se está materializando ante sus ojos.
Seguiré analizando mas tarde.
Continuo con el analisis: (Sigue el Spoiler)
ResponderEliminarGretta queda suspendida en la evocación de su amor de juventud, Michael Furey, amor por un joven muerto que irrumpe en su vida con mucha más fuerza que el amor por su marido. Este recuerdo desencadenará la epifanía (revelación) de Gabriel, al descubrir los sentimientos profundamente ocultos de su mujer hacia otro hombre que pertenece al mundo de los muertos, alguíen contra el cual no puede competir ya que tras muchos años muerto tiene más fuerza y más presencia que el mismo en el corazón de Gretta, y que pone en evidencia la sinrazón de su matrimonio.
“Mejor pasar audaz al otro mundo en el apogeo de una pasión que marchitarse consumido funestamente por la vida”.
En la escena final del cuarto de hotel, Gabriel, luego de escuchar de boca de su mujer la historia de Michael Furey, se queda pensativo mirando los rasgos de Gretta, sumergiéndose en el pasado, el presente y el futuro.
La falta de reconocimiento de éstos como "suyos" implica la llegada de nuevas reflexiones tras la revelación.
Mira a través de la ventana, observa la nieve que cae sobre la calle y se lanza a un monologo interno profundamente existencialista. La nieve, como símbolo de la muerte, de la inmovilidad, que envuelve fatal y definitivamente a todos, igualando a los vivos y a los muertos. La resignación de Gabriel, su melancolía, se convierten en la losa del sepulcro que encerraba la sociedad irlandesa en un osario de muertos ilustres y vivos mediocres. Una losa que Joyce y Huston apenas entreabren para mostrar la convivencia pacífica y sin esperanza de los vivos y los muertos, y que vuelve a cerrar dejando que la nieve la cubra.
No hay salida para estos dublineses, pero al menos para Gabriel sí hay una toma de conciencia que quizás más tarde provoque su reacción.
Bueno , he de decir que la película para mi no cobra sentido hasta el final.
ResponderEliminarEs más no me enteré de algo tan importante como el titulo real ("The dead") hasta ahora que estoy leyendo todo lo que habeis escrito.
Para mi en conjunto toda la película es como la agonía de un enfermo terminal. Como va tomando sus ultimas bocanadas de aire despacio, una tras otra, hasta que toma la última, y ya nunca mas volverá a respirar.
Cada momento de luz de la película es como una pequeña bocanada de aire, que se sigue de un buen rato de apnea.
Creo que la última bocanada es la canción "La joven de Aughrim" un precioso momento melancólico, tras la cual el desarrollo de la película te hace ver el profundo vacío y soledad, que hay tras la muerte.
No son los muertos y las tradiciones lo que pesa en la película, es la falta de vida de sus personajes, totalmente angustiados porque llegue un invitado borracho, porque no salga bien el discurso...
Y la apoteosis final es un momentazo existencialista tristísimo y durísimo de reconocimiento de un profundo vacío. Del atisbo de aceptación por parte de Gabriel del horroroso sentimiento de estar casado con alguien que no le ha querido nunca profundamente y que ahora se convierte en una certeza.
Para mi están todos más muertos que en una peli de zombis, y además corroídos por una profunda nostalgia.
No me extraña que se titule "Los muertos", Huston ha conseguido trasmitir eficazmente esa sensación agónica con un perfecto tratamiento de la luz, movimientos pausados y una puesta en escena casi teatral con escasos decorados.
Menos mal que dura poco, pues sino creo que arrastraría a la muerte a los espectadores…
Un saludo a todos y buenas fiestas.
Unos últimos apuntes después del inspirado comentario de Rafa.
ResponderEliminarEl personaje de Gabriel en el cuento de Joyce representa al propio escritor. Este se veía encorsetadísimo en su Irlanda natal, artísticamente limitado por la crítica, el gusto de los lectores y por el resto de literatos del país; absolutamente anclados en la tradición literaria local y en la reverencia a los escritores del pasado (muertos).
Cuando el propio Joyce asume esta situación (al igual que Gabriel en la película) decide mudarse a París y allí escribe el "Ulises" poniendose así a la cabeza de la vanguardia literaria del momento.
En otro orden de cosas me gustaría señalar los aportes del propio Huston con respecto a la obra literaria:
-Da más relevancia al personaje de Gretta (no en vano es el papa de Anjelica), en la novela es un personaje mucho más indefinido, algunos críticos lo califican como casi fantasmal.
-Introduce en la velada el recitativo del poema de Lady Gregory "Votos rotos" que a mi juicio resulta imprescindible (por su propio texto y por las emociones que desata en Gretta) para intuir el desenlace del film y comprenderlo.
Por último el personaje Miss Ivors (la señora que reprocha a Gabriel su falta de patriotismo) cuando sale de la fiesta dice que va a un mitín republicano. Esto tampoco aparece en la novela y con ello Huston pone de manifiesto algo tan importante para la Irlanda de la época como es la lucha por la independencia de Gran Bretaña (1922). Algo que seguramente Joyce obvió para no tener problemas con la censura política o la policía.
Por último y sin extenderme apuntaré mi momento favorito de la película. Es la escena de la escalera en la que Gretta queda practicamente en trance al escuchar la canción de su amante muerto.
Me parece genial tanto en la planificación, como en la fotografía y la luz, la belleza de la melodía y por el fantástico momento interpretativo con que nos regala Anjelica Huston.
Mi momento favorito del film, coincide con el de la poesía de Lady Gregory "Votos rotos". Huston va alternando primeros planos de Gabriel, de su esposa y del poeta. Esta escena derrocha intensidad en una velada aparentemente normal, donde nada extraordinario sucede. Es el primer guiño para el espectador que a partir de esa escena, siente inquietud y curiosidad por la relación que une a ambos esposos. Gabriel observa intensamente a su mujer, parece querer adentrarse en su pensamiento y comprender la profunda tristeza que él intuye en ella. De fondo se oye la voz del poeta, entonando versos tan hermosos como tristes y que hacen enmudecer a todos.
ResponderEliminarGabriel es un hombre aparentemente bien adaptado a la sociedad en la que vive, de hecho es uno de sus pilares. Sin embargo, como él mismo dice, está harto de todo lo irlandés. Su espíritu tiende a la apertura, y se le critica por ello.
En la escena a la que me refiero, le vemos emocionarse. Es evidente que Gretta despierta en él sentimientos profundos. Cuando al final de la película descubre el verdadero papel que ella le otorga en su corazón y en su vida, acaba por perder lo último que le aún le hacía sentir.
Si Gabriel encarna a James Joyce, el título de la pélicula de Huston "The dead", representa perfectamente como debía sentirse el escritor en ese mundo que nos retrata.
Se me ocurre otro título: "Yermo".
@David, el símil que expones de la caida de la nieve como símbolo de la muerte y la reflexión que lo acompaña, me parecen terribles y muy bellos.
A mí, la caída de la nieve se me antoja más como el paso del tiempo. De como la nieve al caer inmaculada capa sobre capa, sin dejar huella, recuerda al paso del tiempo y de que todos nosotros que desaparecemos bajo sus capas, sin dejar huella.
Gabriel es testigo de ello mientras mira por la ventana y se siente yermo.
Afortunadamente J.Joyce sí nos dejó su huella.
Por último, señalar que la figura cómica de las películas de Huston, la representa aquí el borrachín. Es un personaje patético y el único que crea inseguridad a las viejas anfitrionas. Nos cuentan un mundo controlado, seguro y formal, donde el peligro viene de la mano de un ser completamente inofensivo. James Joyce vivió en ese universo encorsetado y limitante, que le hizo buscar nuevos horizontes en Europa.
ResponderEliminarEl personaje de la mujer activista nacionalista ofrece un contrapunto al del protagonista. Ella no se queda a cenar, no participa de la tradición, algo más importante la reclama, ha de acudir a un mitin en el que reivindica, paradójicamente, sus raíces irlandesas. Gabriel, sí hace los honores, cumple con el papel que le asignan, pero su espíritu es de apertura y necesita nuevos horizontes, busca alejarse de ese mundo y sin embargo se queda toda la velada y participa.
Rafa, enhorabuena por tu comentario, me parece muy acertada la comparación con la apnea que expones.
Gran post, David y muy buenos los comentarios. Estoy totalmente de acuerdo con todo lo que dices. Comentas que Gabriel está sometido a los jueces de la tradición y por la presencia continua de los muertos que, por lo general, eran seguidores fieles de esa tradición. Pero no sólo a Gabriel le ocurre esto, le ocurre también a Freddy que no acepta tan amablemente convencionalismos ni a una madre severa y antigua, aunque la quiera por ser su madre (tal vez bebiera y estuviera atormentado por eso) y en la cena tiene una pequeña trifulca con el anciano por no estar muy conforme con un comentario que hace. Freddy es un contrapunto de Gabriel y por eso ambos tienen ese filing, porque, aunque distintos, tienen cosas y piensan parecido: concuerdan en lo esencial, son dos caras de la misma moneda... Gabriel es cortés y mantiene las formas, es incluso hipócrita, en su discurso de alabanza a las anfitrionas porque no es de ese tipo de vida y no le gusta lo que representan, pero, a la vez, les tiene cierto cariño y respeto por su buena voluntad e intenciones... son mujeres que están equivocadas, tan sólo... Qué gran peli y qué olvidada la tenía! La vi de adolescente, normal que me gustara mucho más ahora que he madurado en algunas cosas :-) , pero no en otras :-(
ResponderEliminarLa sensación de tristeza permanece durante todo el metraje; los recuerdos del pasado están muy presentes y el paso del tiempo es como una losa. Los cambios producen sentimientos melancólicos, y no se acepta de muy buen grado la modernidad, excepto Gabriel y su amigo rebelde y borrachín, a su pesar, Freddy. Esta peli está llena de sentimientos que se encuentran y de momentos de desencuentro. La muerte, y los muertos, lo inundan casi todo con su presencia ausente; y más en una Anjelica Huston... CUIDADO, NO LEER A CONTINUACIÓN SI NO HABÉIS VISTO LA PELÍCULA, PODRÍA ESTROPEAR ALGO IMPORTANTE...
...enamorada de un muerto y que provoca en su marido una sensación brutal de impotencia, rabia (seguramente, así lo puedo entender yo) y de tristeza: una verdadera agonía para él que lo sumerge, aún más, en la más triste insignificancia. Su vida tiene otro sentido a partir de esa revelación que también está presente, pero esta vez no en el ambiente de todo ni de todos a causa de la muerte, sino en su esposa, a la que ya ve de otro modo y con la que vivió una vida que fue una ilusión. La sensación de insignificancia es tan poderosa que lo traspasa, y no reacciona sino pensando en lo que es la vida y el sentido que puede tener (en un monólogo interior muy poético y existencial)
Hola a todos, enhorabouena por vuestros análisis, gracias a ellos he apreciado mejor la película. Me ha impresionado más que me ha gustado, y por lo visto de eso se trataba.
ResponderEliminar@Javi: Muy acertado lo que comentas sobre el personaje de Freddy y su relación con Gabriel. Era una idea que se me había pasado por la cabeza pero que no llegué a darle forma, así que es fenomenal que lo hayas hecho tú.
ResponderEliminarCoincido en que no es una casualidad que Freddy y Gabriel sean primos con una infancia adolescencia que aparentemente han pasado juntos. Ambos son inconformistas con el mundo que les rodea pero están atrapados por este y se adaptan como pueden. Gabriel, ya lo hemos comentado, ejerce su rebeldía de manera intelectual pero mantiene las costumbres y las formas sociales y se aferra a su matrimonio para encontrar un equilibrio. Freddy tan inconformista como Gabriel pero peor adaptado se libera con la bebida, esto le permite esas salidas de tono que aterrorizan a las tías viejitas y que no son más que un ejercicio de su libre albedrío (digo lo que pienso y me da igual si es aceptable por la tradición o por las normas de sociedad o no).
La peli es muy rica en detalles y se le puede sacar mucho jugo. Gracias por participar con este acertado comentario.
Un saludo.
PD: Ayer vimos "El turista" (como ya te dije sin pretensiones) y nos lo pasamos bastante bien.
@Anónimo: Me alegro que hayas disfrutado con los análisis, acercate por el blog siempre que te apetezca, tu y tus comentarios sereis bienvenidos.
Un saludo.
Muy bien expresado, David. Estás hecho un crack y te deberían contratar en una revista de críticas de cine. Ya quisieran algunos de los que escriben en ellas ver las cosas como las ves tu; y lo que digo lo siento... eres bueno y escribes que te cagas...
ResponderEliminar@Javi: Bueno... me siento muy halagado por tus palabras.
ResponderEliminarGracias (rubor).
Los comentarios me parecen muy interesantes. Dublineses es una historia tan cargada de matices que permite analizar a todos y cada uno de los personajes.Freddy viene a ser la personificación de la repulsa al orden establecido, le pone rostro y le da expresión. El rechazo de Gabriel es intelectual y no se ve apoyado por las formas, ya que estas son ejemplares. Freddy sin embargo presenta un comportamiento absolutamente inadecuado, la sociedad lo rechaza, empezando por su madre, y él no se adapta a esa sociedad. Muy gráfico es el momento en que Freddy va a saludar a su madre y esta gira la cabeza ignorándole y haciendose la ofendida.¡Con una madre así debe ser fácil caer en la bebida!
ResponderEliminarTambién podríamos analizar a otros personajes, desde las viejas anfitrionas y la sobrina solterona que representan los valores mas inamovibles de la sociedad pasando por el tenor o por la activista política. James Joyce carga de contenido a todos sus personajes, en una historia en la que no ocurre "nada".De la amno de Joyce y de Huston hemos disfrutado de una obra maestra en sutileza y elegancia.
Es cierto, Cristina, Freddy es un rebelde y su tormento lo exterioriza bebiendo y comportándose así, aunque la sociedad lo señale; además, a su manera, se ríe de las tradiciones y el respeto a ellas... me hizo mucha gracia y es significativa la escena en la que alaba con descaro a la mujer anfitriona que canta, casi hasta agobiarla; él se da cuenta de su incomodidad, pero le da igual: sigue diciéndole, con una ironía descarada, que ella canta estupendamente... lo que ocurre es que a él se le permite eso y no saben cómo tomárselo: como a un cínico sarcástico o como a un pobre hombre que bebe. Freddy, como no es tan tonto, juega y se aprovecha de eso para ser ambiguo en cierta manera. Ciao... igual se me ocurre algo más que decir, pero será algo complicado. Ya habéis destripado y analizado la peli muy bien
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