Voyeurismo, narcisismo, infidelidad, bestialismo, autoagresiones,
sadomasoquismo y homosexualidad latente.
No, esto no es un listado de parafilias, sino los caminos
por los que transita John Huston, en
mayor o menor grado, en “Reflejos en un
ojo dorado”.
Basada en la novela de Carson McCullers, es un estudio sobre un grupo de individuos de
alma distorsionada, que esconden tras una apariencia de normalidad, conductas afectivas
y sexuales aberrantes reprimidas en mayor o menor grado, que Huston va desgranando a lo largo de la
cinta con su habitual maestría.
FICHA
TÉCNICA: REFLEJOS EN
UN OJO DORADO “Reflections in a golden eye”.
AÑO:
1967. DURACIÓN: 108 min. PAÍS: Estados Unidos.
DIRECTOR: John Huston.
GUIÓN: Gladys Hill, Francis F. Coppola, Chapman Mortimer. MÚSICA: Toshiro Mayuzumi. FOTOGRAFÍA: Aldo Tonti.
REPARTO: Marlon Brando, Elizabeth Taylor, Brian Keith, Julie Harris, Robert Foster, Zorro David.
DIRECTOR: John Huston.
GUIÓN: Gladys Hill, Francis F. Coppola, Chapman Mortimer. MÚSICA: Toshiro Mayuzumi. FOTOGRAFÍA: Aldo Tonti.
REPARTO: Marlon Brando, Elizabeth Taylor, Brian Keith, Julie Harris, Robert Foster, Zorro David.
PRODUCTORA: Warner Bros. Productor: Ray Stark. GÉNERO: Drama. American Gothic.
Ejército.
SINOPSIS: El comandante Weldon Penderton y su esposa
Eleanora viven en un fuerte militar en Georgia. Aunque el matrimonio es un
fracaso ambos mantienen las apariencias y dan aspecto de normalidad conyugal.
A Penderton, un rígido militar que da clases en la
academia, le desagrada todo lo que tiene que ver con su atractiva esposa. Eleanora
le desprecia abiertamente y mantiene en secreto una aventura con su vecino el
coronel Langdon. Este último está casado
con Alison, una mujer deprimida que sólo encuentra consuelo en la compañía de
su criado homosexual Anaclet.
La entrada en escena del soldado raso Williams,
encargado de cuidar el caballo de Eleanora, precipitará de manera irreversible
los acontecimientos.
Bajo la aparente normalidad que vive el matrimonio de
Weldon y Eleanora se ocultan una serie de represiones y secretos que poco a
poco van saliendo a la luz conforme avanza el metraje.
El ritmo que imprime Huston
al film es absolutamente eficaz para que el espectador comprenda la existencia distorsionada
en la que viven sus personajes. Una y otra vez se suceden situaciones en las
que progresivamente la acción se va cargando de una energía malsana, ésta va
acumulándose hasta estallar en una convulsión de violencia y frustración.
Las brillantes interpretaciones de Brando y Taylor avivadas por la siniestra música de Mayuzumi nos ponen los pelos como escarpias y nos telegrafían, en todo momento, que esta historia no puede acabar bien.
Las brillantes interpretaciones de Brando y Taylor avivadas por la siniestra música de Mayuzumi nos ponen los pelos como escarpias y nos telegrafían, en todo momento, que esta historia no puede acabar bien.
Brando con sus miradas, sus gestos mínimos y unos diálogos perfectamente
cincelados compone magistralmente a su
personaje; un individuo inseguro, de pasiones reprimidas y permanentemente acomplejado
por el desprecio de su esposa.
Magnífica también Elisabeth
Taylor, la sensual Eleanora con su lengua afilada como un cuchillo,
frívola, egoísta y acostumbrada a hacer su voluntad. Interpreta a una mujer satisfecha que sabido
crearse una situación “cómoda” (pese al fracaso de su matrimonio) en la que
disfruta tanto de las atenciones de su amante como de las humillaciones a las
que somete a su marido.
No puedo dejar de citar las buenísimas composiciones de Zorro David como Anaclet y de Julie Harris como Allison y la
particular relación que mantienen entre ellos.
Por último comentar que estamos ante una película de miradas
subrepticias, de un voyeurismo enfermizo en el que se “recuecen” parte de los
personajes.
La habilidad de Huston
hace que nosotros no sólo seamos los espectadores de este malsano juego de miradas, sino que muchas veces nos hace sentirnos dentro de él, como si fuéramos un observador
clandestino más.
La desconozco David, creo que no la he visto nunca.
ResponderEliminarBienvenido Marcos, hay que poner remedio a eso.
ResponderEliminarMira tu correo electrónico...
Un saludo.
Esta es una película llena de guiños. Trata con sutileza, y supongo que no sólo por casualidad,sino por obligación también, dada la época en la que se filmó, múltiples temas.
ResponderEliminarPor supuesto la homosexualidad, ese demonio que acorrala a Brando. Su interpretación es exquisita, junto a él vamos descubriéndola, nos lleva por los caminos del auto-reconocimiento de Weldon con una interpretación sobria, un gesto de cejas, una mirada de soslayo. Es todo elegancia y sutileza.
Trata del voyeurismo, claro que en realidad es el medio conductor, aquel con el que nos permite recorrer la vida de los personajes.
Trata de la infidelidad, y de los impulsos humanos reprimidos y dolorosos.
La homosexualidad es sinónimo de falta de hombría. Por eso Liz Taylor desprecia públicamente a su marido, por eso admira a su semental.Marlon siente el desafío quiere medirse con el caballo. Necesita demostrarse a sí mismo que es lo bastante hombre como para dominarlo.Pero no le sale bien.
Liz Taylor es una mujer consentida, caprichosa pero que disfruta vejando a su marido, en realidad le gusta la vida que lleva. Es infiel, provocadora y no se inmuta ante el dolor ajeno.Es mi entender el personaje más odioso de la película, sin embargo no está tan loca como los demás.
El contrapunto lo ofrece Allison. Su relación con el chino es muy especial. Zorro David,que hasta el nombre tiene curioso, es un homosexual declarado, con un papel cómico que se agradece entre tanto drama.
Una vez más Huston apuesta por los personajes complejos y sus pasiones, y por las interrelaciones entre ellos.
Por último me referiré a la espeluzmante música de la banda sonora de Mayuzumi, desde los créditos hasta la escena final. Crean gran desasosiego, resultan cacofónicos por momentos. Es la expresión sonora perfecta para contar la disfuncionalidad de la vida de los personajes.
Mi escena favorita,es la del final. Me parece sublime el gesto de Marlon atusándose el pelo con la mano. Es un gesto de coquetería, y con el arrastra el reconocimiento, por fin, de la obsesión que le atormenta durante toda la película.Sus deseos abandonan el terrreno de la obsesión para convertirse en una realidad. Weldon está emocionado como un adolescente en su primera cita. Pero el objeto de sus deseos le traiciona, no le escoge a él. El desengaño es tan arduo y tan imposible de soportar que solo con la muerte del ser deseado puede acallar su dolor. Ojo por ojo.....
ResponderEliminarCreo que estamos ante otra película imprescindible.
ResponderEliminarLa realización es excelente, como también lo son las interpretaciones de Liz Taylor y Marlon Brando.
Huston maneja magistralmente el tempo de la película (como ya comenté en la entrada) y la planificación, usando camaras subjetivas que nos muestran la realidad a través de los ojos del soldado Williams, de Penderton y de Allison.
También consigue introducirnos dentro de la trama generando el efecto de ser otro voyeur más, a través de algo que ya le hemos visto en otras pelis de este ciclo (especialmente en "El tesoro de Sierra Madre"), coloca la cámara a la espalda de uno de los personajes con el otro en segundo plano.
También es fantástica la manera tan sutil con la que sugiere los temas que podían ser especialmente escandalosos en la época en que se hizo:
El autoreconocimiento de la homosexualidad de Penderton y su atracción por Williams:
-Con Williams montando desnudo al caballo (que simboliza la virilidad durante todo el film) escena de la que el comandante no puede apartar la vista, simbolizando un acto sexual entre hombres.
-Con el papel que Willians ha dejado caer al suelo tras el combate de boxeo. Lo guarda junto a sus trofeos fetichistas y lo acaricia en secreto habiendole dado forma de canuto (fálica).
-Cuando tras la muerte de Alison, su marido hace referencia a Anaclet comentando (¡y añorandole!) sus gustos por la música, el baile y la pintura. Afirmando que la vida militar le podría hacer un "hombre" de verdad. Y ahí Wendell tumbado (como en el diván del psicoanalista) con un whisky en la mano se lanza en una diatriba en favor de Anaclet y a favor de llevar la forma de vida que está deacuerdo con los sentimientos de uno mismo ya cuente o no con la aprobación del resto de la gente.
-Y por último el momento que cita Cris como su favorito, con Penderton sentado en su cama con la puerta entreabierta y peinándose (grandísimo de nuevo Brando) y a la espera del ser deseado.
El personaje de Leonora también está sumamente bien dibujado. Frívola, egoísta y sádica.
Las humillaciones a su marido son brutales, poniendo en entrdicho su virilidad comparandolo con su caballo o desafiandolo con sus encantos. Enorme momento el de su desnudo, primero ofreciendosele con el culo en pompa y después desnudandose, lanzandole a la cara su ropa interior y espentandole que sus prejuicios puritanos no esconden más que su impotencia. Esta secuencia acaba con el voyeur Williams observando desde la ventana la escena y a Eleanora con su desnudo oculto entre las sombras ¡Exquisito ejercicio cinematográfico!
Finalmente los fustazos por la agresión al caballo ¡Qué escena más violenta! Escalofriante, ahí con Wendell aguantando los golpes como si los mereciese (sadomasoquismo puro y duro).
La vi el otro dia y lo siento, no me gustó. No me gustó el formato de imagen, los silencios, la dinámica de la peli, no sé... Igual el estado de ánimo del espectador es importante y no estaba yo muy receptivo.
ResponderEliminarPrometo volver a verla en una o dos semanas y volver a escribir...
Vaya Marc te has puesto las pilas después de las vacaciones.
ResponderEliminar¿Has hecho una sesión triple como en los autocines?
Mi momento favorito es el de la cabalgada de Brando sobre el caballo de Eleanora.
ResponderEliminarPenderton dispuesto a demostrarse a sí mismo que es lo suficientemente "macho" como para dominar al caballo (como ya dije símbolo de virilidad). En la cuadra todos ponen cara de circunstancias, saben que no es jinete para ese caballo, tras el trote inicial, Penderton pica espuelas y el caballo se lanza desbocado.
Aquí la planificación y Brando están sublimes. Huston mantiene el plano medio a la perfección y Brando es capaz de actuar sobre el caballo a toda pastilla, sin dobles ni trucos informáticos.
Al final el jinete cae, se levanta frustrado y humillado y apalea al animal para descargar su frustración, su rabia (todo muy simbólico). Finalmente consciente de lo que ha hecho cae derrotado, confundido y sintiendose mal consigo mismo; y ahí llega el soldado desnudo, pasa a su lado, tranquiliza al caballo y lo lleva de nuevo a la cuadra para curarle.
Muy buena entrada. Ya había oído hablar de la peli. Me interesa Huston y me interesa Brando, éste es un portento de la interpretación y me da que en esta peli lo clava. Un saludo
ResponderEliminarSencillamente genial.
ResponderEliminarMe parece característica la lentitud de muchos planos, acostumbrados a la rapidez de la cámara en el cine actual. Pero esa lentitud no se me hace pesada, esas escenas tan largas con esa música magnética atrapan, esperando durante cien minutos "que pase algo" y ese "algo" sólo sucede en el último minuto.
Actores: Brandon superior, Liz Taylor no me gusta, no es que lo haga mal, pero es un papel sobreactuado que cualquier actriz mediocre podría sacar adelante. La pareja de la señora con el filipino, encantadores.
@Javier: Pues a mi me gusta mucho Liz Taylor en esta peli y eso que como actriz no es santo de mi devoción. Sobre todo me encanta su forma de mirar: Desafiante, libidinosa o directiva, nunca neutra ni amable y siempre con malevolencia.
ResponderEliminarCarson McCullers es el nombre de casada de Lula Carson Smith, 1917-1967. Curiosamente murió el año que se estrenó "Reflejos..."Fue una mujer que arrastró problemas de salud desde muy joven. A los 15 años sufrió una fiebre reumática que fue mal diagnosticada por lo que tuvo múltiples recaidas durante su vida.En 1941 precisamente el año en que se publicó su segunda novela, reflejos en un ojo dorado, sufrió un ataque cerebral que le paralizó medio cuerpo.Pero su actividad literaria e intelectual no decayó. Murió de cancer de mama en 1967, tras haber sufrido varios ataques al corazón.
ResponderEliminarEsta mujer empezó su andadura centrándose en la música, pero acabó abandonándola por la literatura. Conoció a su futuro marido, Reeves McCullers que era un soldado con expectativas de convertirse en escritor, y juntos se dedicaron a escribir. Sin embargo se separó de él para luego volver a contraer matrimonio con él mismo años más tarde.Mantuvo relaciones íntimas con dos mujeres, una de ellas la escritora Annemarie Schwarzenbach, con la que mantuvo una relación sentimental mientras escribía "Reflejos...".. La novela provocó un gran escándalo en la época. Los temas que en ella se abordan, y la vida de la autora fueron el caldo de cultivo de críticas feroces. A la edad de 23 años publicó su primera novela,"El corazón es un cazador solitario", que fue considerada una obra maestra. Al año siguiente publicó "Reflejos....".
Los temas preferidos de la autora eran las historias de marginados,inadaptados, el adulterio, la homosexualidad y el racismo. No fue casualidad que John Huston eligiera su obra para llevarla al cine.
El que Marlon Brando acabara interpretando a Weldon, fue fruto de varias casualidades. El papel era inicialmente para Montgomery Clift, que fué impuesto por Taylor en contra de la opiniñon de Huston. Pero M. Clift falleció unos días antes del rodaje víctima de un ataque al corazón. El papel también se le ofreció a otros actores que lo rechazaron, hasta que por fin se le propuso a Brando quien lo aceptó de inmediato.
ResponderEliminarPara entender mejor el personaje de Weldom, transcribo a continuación unas lineas de la novela de Carson McCullers:
“Después de pasar junto al soldado tenía que contener el fuerte impulso de darse la vuelta, y, a medida que se alejaba, su corazón se iba llenando de una nostalgia tan profunda que se sentía incapaz de dominarla”…
“Se sentía flotar libre de toda atadura humana mientras llevaba dentro de él la imagen del joven solado, del mismo modo que una bruja llevaría en su seno algún poderoso amuleto. En aquellos momentos experimentaba una vulnerabilidad particular. A pesar de sentirse aislado de los demás, lo que veía durante esos paseos adquiría una importancia desproporcionada ante sus ojos. Todo aquello con lo que tomaba contacto, aún los objetos más triviales, parecía tener un sentido misterioso relacionado con su destino. Había llegado a perder su antigua facultad para la clasificación instintiva de las diversas impresiones sensoriales según sus valores relativos… Tampoco intentaba ya justificar el estado emocional que se había apoderado de él. Cuando pensaba en el soldado no lo hacía en términos de amor o de odio; sólo tenía conciencia de su irresistible deseo de romper todas las barreras que existían entre ellos”…
Opino que la interpretación de Brando refleja exactamente aquello que McCullers pretendía mostrarnos. Grandiosa.
Mágnifica película, de una extraordinaria novela
ResponderEliminaryo había leído, hace mucho la novela de McCullers, así cómo otras de la misma autora, y tengo que reconocer que el film, me gusto mucho
dos actores impresionantes, no nos olvidemos de los secundarios excelentes, creo que el papel
de Brando, estaba pensado para Monty, pero el no quisó, precisamente para no interpretar a un homosexual, no sé cómo hubiera quedado, pero la pareja Liz Burton y Brando, de 10
Saludos, hace poco que he descubierto tu pagina
y me encanta, poder hablar de CINE.
uN ABRAZO.
Hola Susan Lenox y bienvenida al blog, como tú comentas la peli es excelente y las interpretaciones buenísimas. Yo no conocía la película, ni la obra de McCullers, pero después de ver la película apetece leer sus novelas.
ResponderEliminarEn cuanto a Monty no fue el elegido porque murió justo antes de empezar el rodaje y rápidamente buscaron a Brando... tras ver la peli es dificil imaginar a un coronel Penderton mejor que Brando.
Gracias por participar, nos encantará seguir contando con tus opiniones.
Feliz Navidad.
hola susan bienvenida
ResponderEliminarSi me ha hecho el ponpis gaseosa madre mía que pedazo de papelón hace Brandon,
La peli es buena un pelín almodobariana, un conjunto de personalidades al límite, metidas en una olla a presión
Brandon un pobre gay nacido y criado en el ejercito, bien presentado como estratega, no todos en un ejército han de ser mulas de carga estrogenadas
Taylor, es la incomprendida, mujer criada en una escuela militar, alimentada con papilla de pólvora, consentida por ser la hija del jefisimo, solo necesita un hombre que sepa manejarla y dominarla, que este interesado en hacerlo, aplaca su sexualidad con un vecino que lo tiene muy a mano, (no es ni un sex symbol ni nada por el estilo) y su fuerza con una yegua. La pobre no es tan rebelde, es que el mundo la ha hecho así, que diría Carin. El desnudo no es tan desafiante, como demandante, pero claro el brando una vez más pasa de ella.
El soldado raso, pobre castrado por su padre, no toques a las mujeres que son pecado, aplaca su sexualidad montando desnudo a la yegua del objeto de su deseo, y más adelante con actitud voyerista, pero nunca mas allá
El amante, bonachón y más bien bobón, que como no puede mojar con su mujer se tira a la vecina exuberante, pero sigue enamorado de su mujer, cobarde que se ríe y-o disfruta con las bufonadas del filipino, pero que se lo niega a si mi mismo criticándolo cuando se cae por la escalera…, incluso le coge tanto aprecio que al final le quiere ofrecer lo mejor que tiene que es hacer de él un hombre.
Filipino, el personaje más histriónico que tiene la película, para mí no cabe, no es creíble, ni posible dentro de una academia militar, al menos el concepto que tengo de ella, (hay más casos como en la serie marcha no se si os acordáis un hospital militar de campaña, que hay un cirujano travesti…) quizá dentro del ambiente castrense americano tenga doble moral y se admita un 1\2 hombre, para que cualquier miembro de la academia se compare con él y se vea muy hombre, como las griegas y los monos…
Está bien enfocada , el tratamiento de los personajes, todos se van exacerbando , el amante se hunde por la muerte de su esposa, la Taylor se queda sin amante , el soldado cada vez se acerca más a su objeto de deseo, el filipino que no se puede exacerbar mas , desaparece, y Brandon por fin se acepta
Esta muy bien presentado el fetichismo como única salida a sus impulsos, y cuando hablan de la cucharilla y luego la tiene el, nos dice que no es un mero capricho el soldadito, que ya de raza le viene al galgo, para mí no es como dice David que le da forma fálica, solo trata de recuperar la forma original del papel respetando la forma que tenía cuando contenía la chocolatina,
Escenas favoritas, pues varias,
Cuando dando clase se da cuenta que su mujer se va a.... conel vecino, tiene tien un pequeño lapsus y depues de pensarlo continua como si tal cosa
Cuando el soldado corta todas las ramas, el no quiere por que no quiere ver lo que pasa detrás de las ramas
El soldado cabalgando desnudo, ummmm mejor no explico por que
Cuando brando sigue al soldado hay un accidente y todo el mundo se gira, menos él, que mira de frente a su universo, y el soldado mira a través de él como si fuese trasparente para ver el accidente, el interpreta esto como que le mira, de ahí que en las súper escena final cuando se mal coloca los pelos asumiendo que ya se va a realizar su sueño….
Y la matanza por celos, su grito de horror por lo que ha hecho a matado a su sol a su luz…
La serie que comentas era MASH, sobre un hospital de campaña en la guerra de Corea, estaba basada en la peli de Altman,el personaje travesti era un enfermerfo llamado Klinger y era un muy divertido. Me gustaba mucho esa serie, cuando era peque la veía siempre que podía, con los helicopteros trayendo heridos ensangrentados... ¿Vocacional? Puede ser...
ResponderEliminar¡Wow! Me encantaría verla, ¿saben donde puedo verla o bajarla?
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