viernes, 22 de abril de 2011

DE REPENTE, EL ÚLTIMO VERANO

En 1959 se estrenaba la adaptación cinematográfica de la polémica obra teatral de Tennessee Williams "De repente, el último verano". Gore Vidal y el propio Williams se encargaban de transformar el libreto original en un perturbador relato cinematográfico en el que se tocaban temas del calibre del incesto, la homosexualidad, la prostitución masculina y el canibalismo. A pesar de que la historia transita por territorios tan controvertidos, el verdadero eje de la trama es el miedo a la locura. Ya que ésta, según el discurso del dramaturgo, permanece separada de la cordura por una frágil frontera que cualquiera puede atravesar fácilmente.
La película,argumentalmente adelantada para su tiempo, obtuvo un notable éxito de taquilla, ya que contaba con excelentes ingredientes para ello: Un morboso guión que hizo correr rios de tinta, un reparto encabezado por tres titanes de la gran pantalla (Elizabeth Taylor, Katharine Hepburn y Montgomery Clift) y la dirección del solvente y respetado Joseph L. Mankiewicz.

jueves, 14 de abril de 2011

CARTA A TRES ESPOSAS



“Carta a tres esposas” significó para Joseph Mankiewicz el pasaporte hacia el estrellato, con ella obtuvo el DGA en 1949 y los Oscar como mejor director y mejor guionista en la edición de 1950, desde ese momento se le abrieron todas las puertas como director en Hollywood.
El film, basado en el relato de John Klempner “Carta a cinco esposas”, nos ofrece el particular retrato mankiewiczniano de la vida cotidiana en las pequeñas ciudades de los Estados Unidos, sus rituales sociales y los entresijos de las relaciones interpersonales de pareja y de amistad. 
Con este fresco el director consigue de forma coherente y armoniosa combinar una trama sobre las relaciones de pareja y su gusto por la crítica mordaz, todo ello aderezado por un más que conseguido punto de suspense, capaz de captar la atención de los espectadores desde el comienzo de la película.
Y que mejor argucia para ganarse nuestra atención que comenzar el metraje con una pícara y juguetona voz en off femenina, que nos guiará de principio a fin de la película, diciéndonos eso de: “Para empezar, todos los incidentes y personajes de esta historia son ficticios y cualquier parecido con usted o conmigo será una simple coincidencia.”

jueves, 7 de abril de 2011

MUJERES EN VENECIA


 Como resultado de la traumática experiencia sufrida por Joseph Mankiewicz en el rodaje y la postproducción de “Cleopatra” (1963), la salud y la autoconfianza del autor se vieron considerablemente mermadas, de tal forma que el director precisó de prácticamente cuatro años para reunir la energía y determinación suficientes para volver a enfrentarse a una nueva película.
En “Mujeres en Venecia” (1967) encontramos otra buena muestra de lo mejor del cine de Mankiewicz: Su habilidad para escribir una trama excitante, brillantes y ácidos diálogos, esos personajes (especialmente los femeninos) maravillosamente dibujados y una puesta en escena inspirada en el teatro.
Aunque quizás lo más reseñable de la película que hoy nos ocupa, sea su utilización por el autor para plasmar en ella su pensamiento, radicalizado tras la digestión de frustraciones y padecimientos, exponiendo una filosofía personal cargada de cinismo y con la que Mankiewicz pretende saldar cuentas con el pasado.

sábado, 2 de abril de 2011

EVA AL DESNUDO





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El 20 de marzo de 1951 Eva al desnudo” se alzaba con seis premios Oscar: Mejor película, director, guión adaptado, sonido, montaje y actor secundario para George Sanders. Algo que convertía a Joseph L. Mankiewicz en el único director galardonado por la Academia con el mítico binomio, mejor película-mejor guionista, en dos años consecutivos.  
Mankiewicz tenía sólo 41 años y acababa de recibir su merecido reconocimiento por la que sin duda constituye la mejor película que se ha realizado jamás sobre el mundo del teatro. Una inquietante parábola en la que el director nos hace partícipes de las intrigas que se ocultan tras el telón, las candilejas y el escenario; introduciéndonos en un mundo turbio, plagado de ambiciones, narcisismo, vanidad, mentiras y arribismo. Un mundo que pertenece a Eva, el lobo vestido con piel de cordero, que poco a poco se desnuda ante nosotros, mostrándonos su verdadera naturaleza, la de un ser amoral capaz de cualquier cosa por alcanzar el éxito.